martes, 9 de diciembre de 2008

PROCESIÓN DE LA INMACULADA


Durante el día de ayer viví uno de los mejores momentos que he tenido en el mundo cofrade en general y del costal en particular en estos años atrás. Y no sólo por el trabajo realizado, sino por las personas que he tenio cerca en esta jornada.
Por un lado la gente de la junta de gobierno de la Hermandad de la Inmaculada, y por otro los hombres de abajo (como se dice ahora). Es un placer llevar cerca a gente como Fernando Bazán, Fernando Leal, mi primo "Manué" Márquez, Antonio Guerra, Pablo Albarracín o Tony "chico", que aunque este año no ha podido salir a última hora, todos lo hemos tenido presente.

Otra gran ausencia ha sido la de Juan Fernández, costalero que va viendo venir su retirada escribiendo con letras de oro su peculiar (y copiada por muchos) trayectoria costaleril.
De citar aquí también es de recibo la labor de los hombres de negro, destacando a "Afri", a Jesús Cabrera por su buen criterio a la hora de hacer las cosas, y a Pepe Zamora por su atención en todo momento.




Por la mañana a las 12,30 tuvimos el retranqueo del paso, sin haber ninguna incidencia. La priostía encabezada por Pablo Camacho hizo perfectamente su trabajo, al igual que los floristas, con el magnífico exorno que llevaba la Purísima sobre su paso.

A las 17,30 sonaba el Himno Nacional interpretado por la mejor banda de música procesional que hay en la actualidad, la del Maestro Tejera. Centenares de personas se daban cita en la puerta de la Parroquia de la Concepción para ver in situ la salida de la magnífica Imagen que tallara Mario Moya.
El cuidado cortejo lo precedía la Banda "Virgen de la Salud", que comenzó su gran repertorio con el Himno Ecuaristico (Cantemos al Amor de los Amores), ofreciendo una vez más la calidad musical que atesora en estos ultimos años y demostrando que sus proyectos se llevan acabo con el gran nivel que siempre ha caracterizado a esta formación musical.
Momentos muy emotivos y dignos de destacar en la procesión fueron la salida, la capilla del Calvario (destacando el solo de la marcha "Rocío", interpretado por mi amigo Jesús, mejor flauta onubense que he escuchado nunca) , la plaza del Gran Teatro (con los sones de "Soleá, dame la Mano"), y el último tramo desde la calle Concepción hasta el Templo.
Un gran sabor de boca cofrade para terminar este año 2008. Quedará en mí recuerdo y en el de mi gran amigo y hermano Nacho Molina.

*Los pies que se ven en primera instancia son los míos jejejeje.

Fotos: www. huelvacofrade.com

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Agradezco que te hayas acordado de mi con esas palabras.En honor a la verdad,fueron Toni González y tu padre Pepe Llanes,los que me enseñaron como funciona esto.Inmejorable escuela,tanto personal como costalera.

Nacho Molina dijo...

El placer es mío, hermano. Para mí sí que es un auténtico privilegio contar con tu amistad y con tu presencia debajo de la Madre Purísima de Dios, además de todo lo que a tu lado se aprende de esto. Un fuerte abrazo