Por fin llegó el día en el que toda Huelva pudo comprobar que en nuestra ciudad tenemos a un paisano que no sólo no tiene que envidiar nada a los artisas foráneos sino que incluso supera con creces a la mayoría de ellos. Y es que Rafael Infante y María Dolores Romero han roto todo los esquemas del bordado contemporáneo con esta maravillosa obra. No ha dejado a nadie indiferente. Incluso personas que eran reacios a sus trabajos se han dado cuenta que todo es cuestión de querer y poder y nunca de la capacidad de este artista, que permite salir de sus manos todo aquello que se le proponga.
Desde aquí quiero agradecerle a Rafael la oportunidad que me ha dado de poder ser parte de este proyecto, aguantando día tras días mis recomendaciones y haciendo realidad mis gustos. Si algún día he estado demasiado encima del tema que sepa que nunca ha sido por dudar de su trabajo. Al contrario. Lo he hecho con la intentención de que Huelva se de cuenta de una vez por todas que tenemos al mejor bordador que ha habido en nuestra ciudad en muchísimos años.
Han sido muchos meses de trabajo e investigación, con los que se ha demostrado que nada ha sido improvisado. Todo medido y estudiado. Y por ello se ve el resultado tan impresionante y bien hecho. Desde el primer boceto, pasando por la prueba en papel, hasta la última puntada han sido momentos inolvidables que ya llevaré en el recuerdo para los restos.
Han sido muchos meses de trabajo e investigación, con los que se ha demostrado que nada ha sido improvisado. Todo medido y estudiado. Y por ello se ve el resultado tan impresionante y bien hecho. Desde el primer boceto, pasando por la prueba en papel, hasta la última puntada han sido momentos inolvidables que ya llevaré en el recuerdo para los restos.
Gracias Rafael por darlo todo. Gracias a todo tu taller por darnos una joya de esta envergadura.
Fotos: Rafael Llanes, Tras el Altar
2 comentarios:
El diseño y el bordado me parecen impecables, aunque ni esta es la mejor obra de Rafael Infante, ni las anteriores son peores a esta.Son muchos los años en los que este señor lleva en contacto con el bordado, en todas sus vertientes, y el resultado es obvio. A la Virgen le va que "ni pintado". lo hecho, hecho está y lo bueno queda y perdura en la memoria de todos,aunque algunos, a pesar del reconocimiento interno de la evidencia, prefieran mirar hacia otro lado. Enhorabuena a la Hermandad y a Josechu, por haber tenido, frente a cualquier tipo de prejuicios, una enorme amplitud de miras. La envidia, en compañia de la ignorancia, la torpeza y el mal gusto, siguen siendo el pecado nacional
Bufffffffff que maravilla!!!!!!!!!! Me habian comentado que este tio bordaba bien, pero esto se sale. Confieso que me ha roto los esquemas.Un tipo de bordado inusual resuelto de una manera extraordinaria. Lo mas impresionante es lo bien que le sienta a la imagen. Felicitaciones a la Hermandad por esta obra de arte
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