Los mejores momentos vividos en la Cuaresma los pasé entre las paredes de la Iglesia de la Merced. Días previos al Sábado de Pasión que son de una intensidad tremenda, pero a la vez de una enorme satisfación por estar más cerca que nunca de nuestros Titulares y por mucho más tiempo de lo habitual. Muchas han sido las horas junto a mis compañeros del Grupo de Mayordomía, los cuales han dejado apartado sus vidas y compromisos particulares durante varios dias para llevar a cabo todo lo concerniente a las labores de montaje de nuestro paso y limpieza de enseres para la Estación de Penitencia del Sábado de Pasión.
Kuki, Dani y Cinta dan de sí todo lo que deben para que la labor de los mayordomos sea finalmente la que salga a la luz. Y por ello escribo este post. Para que no queden en segundo plano su entrega y sacrificio. Que todo el mundo conozca que la Cofradía de la Santa Cruz tiene 5 mayordomos que, aunque dirigidos por mi batuta, saben perfectamente lo que tiene que hacer en su momento y con una maestría sin precedentes en mi vida cofrade.
No puedo olvidarme de aquellas personas que junto al grupo de mayordomía ofrecen a la Hermandad todas sus horas que le restan a su entorno familiar.
Me quedo con un momento único en mi retina: Delante del paso totalmente terminado en la madrugada del Viernes de Dolores al Sábado de Pasión, satisfecho con el trabajo realizado con la única compañía de mi padre. Todos se habían ido. Pero todos estaban allí.
Kuki, Dani y Cinta dan de sí todo lo que deben para que la labor de los mayordomos sea finalmente la que salga a la luz. Y por ello escribo este post. Para que no queden en segundo plano su entrega y sacrificio. Que todo el mundo conozca que la Cofradía de la Santa Cruz tiene 5 mayordomos que, aunque dirigidos por mi batuta, saben perfectamente lo que tiene que hacer en su momento y con una maestría sin precedentes en mi vida cofrade.
Dani y Palopita (como a todos nos gusta llamarla) llevan desde el comienzo dándolo todo por la Cofradía. Con respecto a mi primo, el Kuki de Huelva, no tengo palabras para describir el trabajo realizado. Este curso ha sido encomiable! Todo el que lo conoce (y no son pocos) sabe de lo que hablo.
Mil gracias a los tres. Yo no puedo agradecerlo de muchas formas, pero estoy seguro que el Señor de la Providencia y Nuestra Madre de Gracia os recompensará día tras día.
A mis transportistas habituales como son Leo, Juanma y Juan Javier con su peaso de furgona... jajaja. Algún día os daré talones de gasolina...jejeje.
No sigo nombrando al resto porque se me olvidará alguien seguro. Pero todos y cada uno de los que habéis pasado por la Catedral a echar una mano en el montaje (y a los que sólo habéis pasado para acompañarnos un rato también) daos por abrazados desde los más hondo de mi corazón.
Me quedo con un momento único en mi retina: Delante del paso totalmente terminado en la madrugada del Viernes de Dolores al Sábado de Pasión, satisfecho con el trabajo realizado con la única compañía de mi padre. Todos se habían ido. Pero todos estaban allí.
Fotos: Ivan Regueira
1 comentario:
Buen trabajo..........
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